“Pocahontas”, como pone en los títulos finales de crédito, hace una interpretación buenísima, con miradas, no miradas, alguna que otra lagrima y casi sin hablar, es capaz de recordarnos lo bonito de la juventud, la belleza de descubrir, lo bella que es la vida si eres parte de la naturaleza y crees en algo, cómo se puede vivir sin resentimiento ni maldad, cómo uno puede ser capaz de aceptar, perdonar y seguir viviendo feliz, vamos, una representación de la inocencia y la pureza. Que más puedo decir, se trata de una Grandísima Película, cargada de momentos que hacen aflorar sentimientos que quizás tengas escondidos; preciosa; sencilla; magnífica la mezcla de música y sonidos, que más que nunca acompañan esa pureza que representa “Pocahontas”. Apta para todos los públicos, pero como bien dices 9º, no apta para todos los paladares, abstenerse los que: no quieran llorar a moco tendido, o no quieran dejarse llevar por sus sentimientos.
Yo le doy un 10, y por supuesto ya la tengo apuntada para lo mejor del año.
Un cariñoso abrazo a todos/as. aDáN
